Washington, DC – I’m disappointed in the 5th Circuit Court of Appeals’ ruling this week to maintain the injunction against President Obama’s bold executive action on immigration. Without the President’s order in effect, parents of children who are U.S. citizens or who have a legal status in the country may be deported, devastating families. This continuing legal limbo also means that millions of young people eligible for deferred action under the expansion of DACA, who have lived in the United States almost their entire lives, will continue to face the threat of deportation. I hope that this is resolved as quickly as possible and that the President’s actions are allowed to proceed in the interest of compassion and justice.
Estoy decepcionado con la decisión de la corte de apelaciones del quinto circuito para mantener la medida en contra de la acción ejecutiva del presidente Obama sobre la inmigración. Sin la orden del Presidente en efecto, los padres de los niños que son ciudadanos estadounidenses o que tienen un estatus legal en el país pueden ser deportados, y por lo tanto devastando a miles de familias. Este limbo legal continuo también significa que millones de jóvenes, que han vivido en los Estados Unidos casi toda su vida, elegibles para el nuevo programa de ampliación de la acción diferida (DACA) seguirán enfrentando la amenaza de deportación. Espero que esto se resuelva lo antes posible y que las acciones del presidente se dejen avanzar en el interés de la compasión y la justicia.